Juan Marconi y su pareja serán padres de un varón
Broche de oro para la historia de amor que protagonizan el periodista y conductor Juan Marconi y Maylen Vicente: serán padres de un varón.
Se conocieron hace ocho años en un boliche y desde hace dos años decidieron pasar la vida juntos. Hoy transitan un gran momento como pareja y como si la felicidad fuera poca, ahora recibieron la mejor noticia: Maylen está embarazada de tres meses. Pronto se convertirán en tres, un momento inolvidable y fundacional en cualquier familia.
Juan tiene 35 años, es licenciado en Relaciones Públicas y tiene una larga trayectoria en la conducción, adaptándose a todo tipo de formatos. Pasó por el reality El Gran Premio de la Cocina, en el que hizo equipo con Carina Zampini durante dos años y medio, estuvo al frente de la edición nocturna de SportsCenter, el noticiero de ESPN que condujo junto a Morena Beltrán. Además, se dio el gusto de ser vicepresidente de Independiente, el club de sus amores.
Por el lado de Maylen, la joven es oriunda de Macachín, La Pampa, y no forma parte del medio, trabaja en una agencia de marketing y tiene un perfil bajo.
Su pasado como árbitro de fútbol
Juan es el hijo del reconocido árbitro, Guillermo Marconi y sentado a la mesa de Juana Viale contó cómo fue su experiencia siguiendo los pasos de su padre, antes de probarse en la conducción. “Soy árbitro recibido e hijo de árbitro, que han insultado muchos fanáticos del fútbol. Mi historia duró muy poco igual”, contó con respecto a su otra profesión, que duró poco tiempo.
“A los 18 años mi viejo me dice hacé algo, maestro, o sea, hacelo, por ahí te divierte. Duré dos partidos porque mis amigos salían a bailar y yo me quedaba a dormir porque tenía que dirigir al día siguiente. Como jugador me probé pero nada”, explicó sobre su paso por el ámbito deportivo.
Sin embargo, el periodista continuó detallando sus primeros pasos en su camino laboral, y reveló uno de los motivos por el que decidió dejar su primera carrera: “Dirigí de verdad dos partidos en un torneo intersindical. Brevemente les explico, me escupió la cara un jugador. No a la violencia obviamente, pero en ese momento no era mi vocación, me peleé ahí y no volví nunca más”. Y ante la sorpresa de Juana y las risas de todos los presentes en la mesa, el invitado aclaró cómo fue el momento: “Eché a uno, vino, me escupió y me nublé, me peleé. Encima después caí que era un equipo, no era el tipo solo, había diez tipos más. Nada, una locura, no estoy orgulloso de haberlo hecho pero bueno”.