Gonzalo Parodi, candidato a intendente de Río Cuarto: “El peronismo no quiere que la gente vote porque ve que pierde la elección”
El próximo domingo la provincia de Córdoba tendrá la primera elección después del recambio de autoridades del año pasado. Será en la segunda ciudad más importante de la ciudad. Río Cuarto elegirá un nuevo intendente y los comicios, que tendrán diez candidatos, parecen definirse entre tres nombres propios que concentran los votos del peronismo y el radicalismo.
En ese tridente que, a priori, discutirá la elección hasta el final, está el radical Gonzalo Parodi. Enfrente le competirán la intendencia Guillermo De Rivas, representante del oficialismo local y provincial, apoyado por el jefe comunal Guillermo Llamosas; el gobernador Martín Llaryora, y el ex mandatario Juan Schiaretti. La tercera en discordia es Adriana Nazario, última pareja de José Manuel de la Sota, que le abrió la interna al peronismo cordobés y dividió los votos del espacio político.
En una entrevista con Infobae, Parodi aseguró que su propuesta representa un cambio de época después de ocho años de gestión del peronismo, de la mano de Llamosas. Su plan para combatir los altos niveles de pobreza, el vínculo que apuesta a tener con Llaryora si es elegido y la denuncia de clientelismo político que encabezó el fin de semana contra el oficialismo local. “Están comprando votos con chapas y colchones”, aseguró.
-En la antesala de las elecciones en Río Cuarto, se presenta una elección donde la competencia parece definerse entre Guillermo De Rivas, Adriana Nazario -dos candidatos del peronismo- y usted. ¿Qué se pone en juego en esta elección?
-La posibilidad de que Río Cuarto salga del estancamiento en el que está. Es una ciudad con mucha riqueza y un potencial enorme, pero tenemos los mismos índices de pobreza que el conurbano. Eso es porque no ha habido una definición de gestionarla de manera distinta. Nosotros decimos que tenemos que volver a ser una ciudad segura y con oportunidades. El domingo tenemos la gran chance de que Río Cuarto vuelva a ser esa ciudad que todos tomaban como modelo. Ahora nos pasaron por arriba ciudades como Villa María y San Francisco. Y Villa Mercedes, en San Luis. Ciudades que nos han copado el desarrollo industrial y todo lo que tiene que ver con los eventos deportivos y culturales. Río Cuarto ha perdido centralidad.
-¿Qué ofrece su propuesta como cambio a la gestión de Hacemos por Córdoba, el peronismo cordobés que hace ocho años que gobierna la ciudad con la intendencia de Juan Manuel Llamosas?
-Primero Río Cuarto es una expresión que ha sumado mucha gente que no ha hecho política. Mucha gente que viene del sector privado, la cultura y el deporte. Es una fuerza que incorporó muchos jóvenes. Es una lista que viene a involucrarse y querer gestionar con transparencia estos enormes recursos que tiene Río Cuarto. Estoy convencido que el plus que le venimos a dar tiene que ver con la conformación de nuestro espacio, que viene a plantear algo nuevo y distinto. Un equipo que está preparado para arremangarse y gestionar este potencial enorme, que está desperdiciado completamente.
-¿Ve una elección de tercios que se define en forma ajustada?
-Es una elección donde el peronismo se ha dividido. Ha pasado en otros lugares en Córdoba, como La Calera o Coronel Moldes, donde el peronismo fue dividido y se dio una elección de tercios. Se toman esas ciudades como ejemplo, donde un sector del peronismo ha sabido plantearse como algo diferente. Nazario, por ejemplo, dice que ella nunca formó parte de un proyecto oficial. Se presenta como algo distinto y hace que la elección sea de tercios. Estamos convencidos que la última semana se va a consolidar la diferencia de nuestro espacio para producir un cambio en Río Cuarto. Ellos son dos versiones que se presentan como distintas, pero son lo mismo.
-¿Por qué?
-De los 10 concejales que tiene el peronismo en el Consejo Deliberante, cuatro son de Nazario, y han conducido espacios muy importantes hasta hace dos meses que presentaron la lista y renunciaron a sus cargos. Son parte de lo mismo que se quieren mostrar diferentes. La única alternativa de cambio es la nuestra.
-¿Cuánto influye en este sprint final el apoyo del gobernador Martín Llaryora y el ex mandatario Juan Schiaretti en favor de Guillermo De Rivas?
-Schiaretti siempre decía que los de afuera son de palo. Voy a utilizar las mismas palabras. Los de afuera son de palo. Acá hay una elección local. Nosotros nunca precisamos de escuderos, ni del apoyo de nadie. Fue una campaña local. Lo que se va a votar el 23 de junio es qué proyecto de ciudad queremos. Conmigo se va a llevar muy bien Llaryora, porque a diferencia de lo que pasó en estos últimos ocho años, va a haber un intendente y no un delegado de la provincia. Acá tenemos un centro cívico donde hay un delegado provincial.
-Usted dice que no hay una posición crítica por formar parte del mismo espacio político.
-Muchas veces se confunde que ser del mismo equipo es decirle a todo que sí al gobernador o no plantearle cuál es la realidad. Nosotros vamos a contar qué necesita Río Cuarto, cuál es la realidad y le vamos a generar proyectos para que la plata que venga de la provincia sea verdaderamente aprovechada y no sean obras definidas en Córdoba, que de poco nos sirven a los ríocuartenses. Hay una voluntad muy grande de la provincia para ayudar, pero por no tener un equipo con liderazgo, decisión y proyecto de ciudad, se terminan generando obras que no necesitamos.
-Una de las banderas del relato político de Llaryora es la construcción del Partido Cordobés, con integrantes de todos los sectores de la provincia. ¿Usted se ve conviviendo o ingresando a ese partido provincial?
-Yo me imagino gestionando de muy buena manera con el gobernador. Llaryora dijo hace poco que no tenía que volver a pasar lo mismo que pasó en una relación entre un ex intendente radical y un ex gobernador peronista. Yo le digo a Llaryora que se quede tranquilo, que lo que él le achaca al intendente del radicalismo de ese momento, yo no lo voy a hacer. No me voy a equivocar. Y lo que él le achaca a De la Sota en su momento, él no lo va a hacer. Porque con 60% de pobres, que cada uno se ponga a ver de qué partido es y de qué gobierno es, y actúe de acuerdo a los intereses de su partido y no los de la gente, sería un error de ambos. Vamos a tener una muy buena relación. Siempre con madurez. Pero representando lo que han elegido los vecinos. Primero Río Cuarto es un partido muy amplio desde lo político.
-¿Qué interpretación hace del Partido Cordobés y la diversidad de esa construcción política?
-Estamos a pocos días de una elección. Hablar del partido cordobés es no entender lo que está pasando hoy en Río Cuarto y el país. Somos una ciudad muy rica y tenemos un 60% de personas debajo de la línea de pobreza. Los mismos números del conurbano. La relación tiene que ser institucional. Lo que están pensando en armar partidos o en las elecciones del 2025, es porque no caminan la calle. Cuando vos caminas la calle, te das cuenta que la gente está viendo cómo llega a fin de mes, cómo paga el alquiler o si tiene un plato de comida en la mesa. Todo lo otro es especulación política. Viven en otra realidad. Veremos en las elecciones del 2025 cuál es la opción provincial de la que somos parte. Ahora es muy apresurado.
-¿Cuál es la propuesta de su espacio político para combatir esos altos niveles de probreza de los que habla?
-Proponemos bajar un 30% los impuestos. Primero para ayudar a todos los vecinos de la ciudad. Patente, agua, saneamiento e inmobiliario. Y comercio e industria, para acompañar a los comerciantes e industriales. Tenemos una zona donde podría haber un montón de desarrollo industrial y para eso nos tenemos que hacer más competitivos y bajar los impuestos. Decimos que Río Cuarto va a rebalsar de oportunidades y trabajo, y eso va a terminar con la cantidad de pobres que hay en la ciudad. Eso va a generar una diferencia. No nos tenemos que conformar con la macroeconomía. No es lo mismo gobernar una provincia del norte con menos recursos, a Río Cuarto que es primera en maíz, tercera en soja y primera en maní. Esta es la provincia con mayor hectáreas sembradas. Tenemos que tener un diferencial. Y eso es política de desarrollo local. Y vamos a laburar mucho en eso. En Río Cuarto como capital de los eventos, aprovechando que estamos en el centro del país. Tenemos muchas propuestas en ese sentido. Y, principalmente, en seguridad.
-¿Qué propuesta tiene en el área de seguridad?
-Vamos a abrir una oficina antinarco. Así se se va a llamar. Yo tengo una experiencia que denuncié kioscos de droga, con nombre y apellidos. Firmé la denuncia en el juzgado de lucha contra el narcotráfico. Siempre trabajé mucho en los barrios. Fui secretario de Desarrollo Social durante ocho años. Y a partir de eso, cada vez que me cuentan de un kiosco de drogas, voy y lo denuncio. Porque para mi la droga es la porquería que arruina la sociedad, que trae violencia e inseguridad. Nos vamos a hacer cargo. Si soy intendente vamos a generar una oficina para tener una estructura administrativa en el municipio que pelee contra cada uno de los kioscos de droga en Río Cuarto. Y vamos a trabajar en conjunto con la provincia, que es la responsable. Pero no nos vamos a hacer los distraídos con ese tema.
-¿El fantasma del narcotráfico aparece cada vez con más fuerza en Córdoba, que está pegada a Santa Fe, una de las provincias más complicadas respecto al avance del crimen organizado?
-Tengo que reconocer algo. Por primera vez un ministro de seguridad de la provincia declaró zona roja Río Cuarto. Lo dijo el ministro Quinteros hace 15 días atrás. Entonces, felicito al Gobernador por reconocer un problema, porque es la única forma de resolverlo. Va a tener un intendente con coraje y liderazgo para acompañarlo en esta pelea.
-¿Qué nivel de preocupación tiene la gente en la calle respecto a la escalada del narcotráfico?
-La seguridad, la situación económica y la venta de drogas son los mayores problemas que tiene la gente en la ciudad.
-El fin de semana hizo una denuncia de clientelismo político contra el oficialismo de Río Cuarto. ¿De que consta puntualmente su acusación al gobierno local?
-El viernes a la mañana un candidato de De Rivas, que es el candidato del peronismo, estaba sacando chapas del Centro Cívico, que es una dependencia provincial. Es la delegación de la casa de Gobierno del gobierno provincial. A las 12:30 del mediodía, junto a un funcionario del gobierno de Llamosas, sacaban chapas del Centro Cívico y la cargaban a una camioneta que tenía los carteles con el nombre de De Rivas y la salían a repartir. Estamos en una situación en dónde es escandaloso el nivel de clientelismo y asistencialismo que está haciendo el gobierno. Porque ve que pierde la elección. Puso la elección el fin de semana más largo del 2024. No quieren que la gente vote. Y quieren llevar gente comprada de las narices. Estamos en la prehistoria en Río Cuarto. Están comprando los votos con chapas, colchones y mercadería. Ya tienen tan poca vergüenza que lo hacen a la luz del día y en un edificio público.
-¿En esa denuncia usted discrimina al gobierno provincial del local? ¿O es parte de una misma estrategia en las previa de los comicios?
-Es una dependencia provincial. Me imagino que si el Gobernador no estaba al tanto y lo vio ahora, echará a los funcionarios que corresponda. Es vergonzoso que con la plata de los cordobeses y ríocuartenses estén sacando chapas del Centro Cívico Provincial para regalarlas y cargarlas arriba de una camioneta que tiene el cartel del candidato a intendente del peronismo. Así que si no lo sabía, ahora se enteró. Es una vergüenza que cuando el 60% de la gente es pobre, todos llegan a fin de mes ajustado y la gente dio un mensaje claro de terminar con la vieja política, con la casta, en Río Cuarto, a plena luz del día, están regalando chapas que se pagan con la guita de todos de los cordobeses. Todos están pagando la campaña del candidato del peronismo local. Más lo que están haciendo con la plata de la municipalidad.
-¿A qué se refiere?
-Hay una denuncia penal del Tribuno de Cuentas. Lo que está pasando es histórico para nuestra ciudad. Nunca llegamos a una situación de estas, donde un Tribuno de Cuentas denunció al candidato oficial por haber contratado cartelería con plata de la Municipalidad. Y que cuando fueron a constatar, en los lugares donde tenía que haber publicidad del municipio, había carteles del candidato oficial. Eso sumado a lo que denunciamos nosotros, más las colas que hubo en la Asociación Atlética Estudiantes, donde te anotabas y te daban $150.000 de parte del gobierno provincial y municipal. Es un escándalo. Ahora están llegando los bolsones con el folleto de De Rivas explicando cómo se vota. Están llegando a todos los barrios de la ciudad. Seguramente son fondos municipales, así que vamos a evaluar si hacemos alguna denuncia al respecto.
-¿Cuánto influye en la participación electoral que la elección sea en un fin de semana largo?
-Mucho. Lo pusieron en esa fecha para que defina la elección. Si vota mucha gente, ganamos nosotros. Si vota menos gente y pueden comprar votos, pueden tener chances. Es lineal. La pusieron un fin de semana largo y la Junta Electoral dijo que la multa por no ir a votar es de $100. Están buscando que la gente no vaya a votar y ganar como en el Siglo XIX.
-¿Cuánto pone en juego el radicalismo en esta elección?
-No pone en juego nada. Más que cuánto pone en juego, es cuánto puede llegar a ganar. Hace ocho años que no gobernamos la ciudad y 24 años que no gobernamos Córdoba, que van a ser 28 años en el final del mandato. Lo que puede surgir es algo nuevo. Puede ser el kilómetro 0 de un nuevo espacio a nivel provincial con características diferentes, de una amplitud que no se ha visto en los últimos tiempos y que me parece que puede generar una opción diferente para Córdoba. En las elecciones nacionales veremos cómo se va a diseminar esa idea.