Horas después de que Luiz Inácio Lula da Silva, sugiriera la celebración de unas nuevas elecciones en Venezuela tras el fraude cometido por el régimen de Nicolás Maduro en las últimas votaciones, el Gobierno de Javier Milei rechazó la propuesta deslizada por el presidente de Brasil y consideró que “no hay motivos” para realizar otro llamado a las urnas.
Así lo expresó el vocero presidencial Manuel Adorni este viernes durante su habitual conferencia de prensa, donde fue consultado acerca de la opción dada por el mandatario del país vecino como posible salida a la crisis que envuelve a la población venezolana desde los comicios del pasado 28 de julio.
“Está claro que nosotros consideramos, y lo he dicho, que acá ya consideramos quién fue el ganador de las elecciones y tenemos una postura clara con respecto a eso”, dijo el portavoz, ratificando a Edmundo González Urrutia como el jefe de Estado electo, el candidato de la oposición liderada por María Corina Machado.
En la misma línea, añadió: “No vemos que exista una razón para que haya elecciones nuevamente en Venezuela. Al margen de eso, y con respecto a tu segunda pregunta, lo cierto es que cada uno es, dentro de otro poder, libre de hacer lo que le parezca mejor. Entendemos que para el kirchnerismo tal vez es difícil pronunciarse en contra de un dictador, pero bueno, son posturas”.
La respuesta del funcionario ocurre un día después de que el líder brasileño reiterara la necesidad de que las autoridades venezolanas divulguen las actas de las elecciones -donde Maduro se alzó como ganador acusado de arrebatarle la victoria a sus opositores- y sugirió dos posibles soluciones para el conflicto: la celebración de nuevas elecciones o la formación de un Gobierno de coalición.
En el marco de una entrevista con el medio Radio T, da Silva sostuvo que “hasta ahora” no se sabe quién ganó los comicios realizados hace ya casi tres semanas porque “no se divulgaron las actas y no se ha podido verificar el resultado de forma independiente”. “Maduro tiene seis meses de mandato. Si tiene sentido común, incluso podría convocar unas nuevas elecciones, creando un comité electoral con miembros de la oposición y observadores del mundo entero”, siguió Lula.
Mientras esta idea comenzaba a surgir en Brasil, la líder opositora venezolana María Corina Machado ya adelantó que no aceptará una segunda vuelta electoral dado que sostiene que el candidato Edmundo González Urrutia fue el claro ganador de los comicios y puso a disposición las actas reunidas y verificadas por su equipo, que respaldan dicho resultado. Asimismo, sostuvo que los números del pasado 28 de julio “no son negociables”, como tampoco lo es “la soberanía popular”, que ya manifestó su voluntad en las urnas.
Tras la polémica que causaron sus dichos de las últimas horas, este viernes el presidente brasileño volvió a dialogar con un medio local acerca de su postura sobre el régimen que lidera a Venezuela. “Creo que Venezuela tiene un régimen muy desagradable. No creo que sea una dictadura, es diferente a una dictadura”, afirmó el mandatario del gigante sudamericano a Radio Gaúcha; al tiempo que agregó: “Es un gobierno con un sesgo autoritario, pero no es una dictadura como conocemos tantas dictaduras en este mundo”.
Finalmente, concluyó: “Lo que creo es que Venezuela es un país muy interesante para Brasil, dado que es un país que tiene kilómetros de frontera con Brasil. Es un país en el que Brasil ha logrado un superávit comercial de casi 5.000 millones, es un país que podría ser un gran socio para Brasil en la construcción de una fuerza política”.
