Fiel a su espíritu aventurero, Carolina Pampita Ardohain viajó a diferentes destinos a lo largo de este año. Sin importar el clima ni la ubicación, la modelo armó las valijas y llegó a su destino por placer y trabajo. En esta oportunidad, la empresaria fijó ubicación en el viejo continente y disfrutó desde las paradisíacas playas de Ibiza hasta la jungla de cemento de la capital española, Madrid.
Luego de celebrar el tercer cumpleaños de su hija Ana García Moritán, la empresaria se despidió de su familia y el frío clima porteño para darle la bienvenida al verano europeo. Desde su llegada, las fotos de su lujoso alojamiento inundaron su feed de Instagram. También hubo algunas postales de los diferentes lugares turísticos que visitó, entre los cuales se destacaron las claras aguas de Ibiza que disfrutó ataviada en un traje de baño azul de dos piezas.
Además, Pampita se metió de lleno en la cultura isleña y disfrutó de un paseo de compras de artesanías, de las cuales fotografió piezas coloridas de cerámica, accesorios para el cabello, bolsos y hasta adornos para las paredes. A su vez, aprovechó para sacar una vez más su lado fashionista y lució un look total black compuesto por un vestido largo lleno de transparencias, un sombrero y un par de lentes del mismo color. Por si fuera poco, su atuendo contaba con diseños de animales como leopardos y una serpiente roja con líneas negras a lo largo de la falda. Luego, la conductora recorrió antiguas edificaciones de la zona, el puerto y hasta locales gastronómicos, donde disfrutó de las delicias que tenían para ofrecerle en el menú.
Pero la diversión de la animadora no se terminó ahí. Su próximo destino fue Madrid, a donde fue muy bien acompañada por su grupo de amigas. Una vez más, se alojó en un hotel con todas las comodidades, entre las cuales se destacó la amplia vista desde el balcón de su habitación, el patio interno, el amplio restaurante de colores claros y ventanales luminosos y el espacioso baño blanco donde aprovechó a fotografiarse. Además, a la hora de llegar al lugar, la presentadora se encontró con un emotivo gesto por parte de la administración, ya que le prepararon en su cama un par de carteles que le daban la bienvenida a sus instalaciones.
Por otro lado, Carolina aprovechó su encuentro con amigas para disfrutar de la noche madrileña. Con la Puerta de Alcalá -conocida como una de las cinco antiguas puertas reales que dan acceso a la ciudad- a sus espaldas, la modelo y sus acompañantes posaron con amplias sonrisas. En ese contexto, ella se decidió por un look informal y lució un amplio vestido con diseños florales en tonos rojizos y azulados, con mangas por encima de los codos y espalda descubierta que resaltó entre los atuendos de las otras mujeres que la acompañaban en la foto.
Cabe señalar que este viaje fue uno de los pocos que realizó sin su familia. Su último destino fue el sur de Argentina, a donde llevó a sus hijos más pequeños y a su sobrino a disfrutar de las bajas temperaturas en medio del receso de invierno. Allí, se animó a probar deportes extremos como snowboarding y, además, jugó con Ana en la nieve, donde armó un muñeco de nieve que enterneció a los fanáticos de su mamá, quienes pudieron ser testigos de cómo se tomó el trabajo para colaborar con la creación de la infante. Para ello, no solo utilizó un par de ramitas que tomó para esa tarea, sino también de trozos de zanahoria para hacer su rostro.
