La palabra de Lissa Vera tras ser acusada de quedarse con 5 millones de pesos destinados a un jardín maternal
Lissa Vera, exintegrante de banda Bandana, enfrenta una fuerte denuncia: se la acusa de solicitar donaciones para un jardín maternal y de no entregar los fondos prometidos. El monto recaudado es de 5 millones de pesos. Luego de que se conoció la incriminación, la cantante se defendió a través de sus redes y dio su versión de los hechos.
“Las donaciones vienen a mi casa, y las transferencias las manejo yo porque así me manejo. Yo compro las cosas que realmente se necesitan, no solo ayudo en un lugar, sino en varios lugares”, explicó, intentando justificar su accionar. Y siguió: “Muchas veces tuve que poner de mi bolsillo para terminar de cumplir con algo que había iniciado. Tengo que hacer este descargo porque no puedo permitir que ensucien el trabajo que hice con tanto amor y a pulmón”.
Sin embargo, esta declaración no calmó los ánimos de los padres y autoridades del jardín, ubicado en la localidad de Virrey del Pino, quienes se mostraron indignados por esta situación. De acuerdo con una de las madres del jardín, el pasado 27 de septiembre, Lissa llegó con la intención de ayudar, acompañada por un equipo del programa Cortá por Lozano (Telefe). Según denunció la mujer, el equipo le sugirió que usara un alias para recibir las donaciones, pero Lissa optó por utilizar el nombre de su hermano en lugar del nombre del jardín. Esto llevó a la confusión sobre el destino de los 5 millones de pesos que, aparentemente, no habrían llegado a la institución. Lissa, en tanto, denunció que está recibiendo amenazas de parte del equipo de producción del programa, así como también de la dirección del jardín.
Sandra Villa, directora del jardín, comentó en el programa LAM (América) sobre este episodio. “Nos enteramos en el momento en que venía el equipo de Cortá por Lozano a hacer un móvil. Veníamos de una actividad festejando porque estaba pasando algo lindo. Hay muchas cosas que nos están haciendo falta en el jardín”, dijo.
La relación entre el jardín y Lissa comenzó hace aproximadamente un año, cuando una madre que era prima de la cantante se ofreció a ayudar. Sin embargo, Sandra señaló que la asistencia de Lissa fue escasa: “Pocas veces nos ayudó, algunas veces nos trajo ropa”, contó la mujer. Al no recibir noticias sobre el presupuesto solicitado, la directora contactó a Jorge, el hermano de Lissa, quien le respondió que solo podrían comprar una heladera y una garrafa.
“Yo ayudo dentro de mis posibilidades; solo somos mi hermano y yo más la gente que colabora desde las redes sociales,” había contado la exintegrante de Bandana en julio pasado diálogo con Teleshow acerca de su espíritu solidario. La situación económica en zonas vulnerables como Virrey del Pino en La Matanza es difícil, pero acciones como estas brindan un rayo de esperanza y demuestran que la solidaridad y el compromiso social pueden marcar la diferencia. La cantante contó que su decisión empezó para unas fiestas de fin de año.
“Muchas veces es importante reforzar la idea de que las pequeñas acciones en conjunto crean una gran ayuda. Recibimos una mano de los vecinos, de gente que se comunica conmigo y nos dona alimentos o dinero, con eso compramos cosas, una canasta navideña muy básica para que tengan para brindar y un pan dulce, veíamos que la situación era bastante complicada y había gente que no tenía dinero,” afirmó.
“Nosotros con mi hermano salimos todas las noches y lo que intentamos es variar un poco la dieta, porque hay una iglesia que está cerca, que también reparten viandas, pero generalmente con comida caliente, ya sea guiso de arroz, polenta, fideos. Eso también lo vamos viendo, porque por ahí cuando nos encontramos con algunas personas en la calle nos cuentan que ya comieron”, detalló.
“El tema es que no sé cuántas veces al día comen, entonces nosotros lo que les llevamos son unos sándwiches hechos bien potentes, en especial en el invierno. Ya sea de chorizo, porque justo hace unos días hice chorizos a la pomarola y también compramos una bondiola de cerdo. La idea es variar en la medida de lo posible. Tenemos, de hecho, a un chico que vive en la calle y tiene diabetes. Así que también tratamos de darle una mano con eso, hacemos lo que podemos”, contó.